“Variaciones para un prologo”. Texto en recuerdo de una muestra de arte.
Ezequiel Martín Barakat.
Recuerdo con especial gratitud y afecto la excelente disposición de la prestigiosa EBC de la Ciudad de México, en albergar una exposición de pinturas, en las etapas iniciales de mi carrera como pintor cuando vivía por azares de mi “alter ego” diplomático, en la fascinante capital mexicana. Celebré en aquel entonces con especial entusiasmo y no menos aprecio, la dedicación del equipo de difusión cultural y la profesionalidad y excelente trato que predomino en todo el proceso, anterior, contemporáneo y posterior a la exhibición, montada en el seno del Paseo de la Plástica de esta institución cuando corría el 2001.
“Metáforas” fue el nombre que llevo esa muestra, en donde predominaba un estilo abstracto de líneas fluidas y movimientos perpendiculares, tonos primarios y formas que horadaban la tela hasta hacer surgir de ella, imágenes y huellas de una memoria relacionada con la búsqueda espiritual, en la que todo artista se embarca cuando se planta, ante la incertidumbre y el vacío existencial, de un lienzo en blanco.
“Variaciones para un prologo” fue la obra que doné al EBC como muestra de agradecimiento y como manifestación de una postura propia ante la relación entre la apreciación artística, no solo como complemento sino como parte esencial de una educación integral, a la que debe aspirar todo aquel que se encuentre en el camino del saber universitario, sea este el de las ramas humanistas o el de las especializadas económico-comerciales de la EBC.
De esta manera, creo que todo lo que podamos aportar los artistas, en cuanto a la difusión de nuestros trabajos así como en relación a la educación del gusto estético y el fomento del saber artístico, es un factor que lleva a enriquecer la formación de los futuros graduados de la escuela de negocios, que alejados (en principio) del lenguaje de las artes visuales, pueden descubrir en ellos un gusto latente o contribuir a su formación como profesionales.
En ese sentido, el arte y la comprensión de las condiciones espirituales que subyacen a toda obra artística en cualquier lenguaje, sea este visual, escrito o sonoro, amplia a los estudiantes su capacidad de comprender la sociedad en que se gestan esas expresiones artísticas y por ende le proveen de herramientas que contribuyen a entender el mundo de los negocios, espacio de creatividad por excelencia.
Deseo fervientemente que la difusión cultural en el seno de la EBC siga su derrotero de consolidación y crecimiento, de cara a la celebración de los jóvenes ochenta años de vida.
Ezequiel Martín Barakat
Artista visual
Ankara, 1 de abril de 2009
Ezequiel Martín Barakat.
Recuerdo con especial gratitud y afecto la excelente disposición de la prestigiosa EBC de la Ciudad de México, en albergar una exposición de pinturas, en las etapas iniciales de mi carrera como pintor cuando vivía por azares de mi “alter ego” diplomático, en la fascinante capital mexicana. Celebré en aquel entonces con especial entusiasmo y no menos aprecio, la dedicación del equipo de difusión cultural y la profesionalidad y excelente trato que predomino en todo el proceso, anterior, contemporáneo y posterior a la exhibición, montada en el seno del Paseo de la Plástica de esta institución cuando corría el 2001.
“Metáforas” fue el nombre que llevo esa muestra, en donde predominaba un estilo abstracto de líneas fluidas y movimientos perpendiculares, tonos primarios y formas que horadaban la tela hasta hacer surgir de ella, imágenes y huellas de una memoria relacionada con la búsqueda espiritual, en la que todo artista se embarca cuando se planta, ante la incertidumbre y el vacío existencial, de un lienzo en blanco.
“Variaciones para un prologo” fue la obra que doné al EBC como muestra de agradecimiento y como manifestación de una postura propia ante la relación entre la apreciación artística, no solo como complemento sino como parte esencial de una educación integral, a la que debe aspirar todo aquel que se encuentre en el camino del saber universitario, sea este el de las ramas humanistas o el de las especializadas económico-comerciales de la EBC.
De esta manera, creo que todo lo que podamos aportar los artistas, en cuanto a la difusión de nuestros trabajos así como en relación a la educación del gusto estético y el fomento del saber artístico, es un factor que lleva a enriquecer la formación de los futuros graduados de la escuela de negocios, que alejados (en principio) del lenguaje de las artes visuales, pueden descubrir en ellos un gusto latente o contribuir a su formación como profesionales.
En ese sentido, el arte y la comprensión de las condiciones espirituales que subyacen a toda obra artística en cualquier lenguaje, sea este visual, escrito o sonoro, amplia a los estudiantes su capacidad de comprender la sociedad en que se gestan esas expresiones artísticas y por ende le proveen de herramientas que contribuyen a entender el mundo de los negocios, espacio de creatividad por excelencia.
Deseo fervientemente que la difusión cultural en el seno de la EBC siga su derrotero de consolidación y crecimiento, de cara a la celebración de los jóvenes ochenta años de vida.
Ezequiel Martín Barakat
Artista visual
Ankara, 1 de abril de 2009